Tras un largo año de espera, los fans de Apple están de enhorabuena. Por fin hoy, 16 de septiembre, ha salido al mercado el nuevo smartphone de la prestigiosa empresa americana: el iPhone 7.
Todo parece indicar que el nuevo modelo de teléfonos inteligentes cosechará el mismo éxito que sus antecesores. Y es que Apple cuenta con un grupo de seguidores de los más fieles, y con unos productos de muy buena calidad (no solo teléfonos móviles), todo sea dicho. Sin embargo, sus elevados precios podrían invitarnos a pensar que sus productos son prohibitivos y no aptos para todos los públicos, algo que, en cierto modo, es cierto. Entonces, ¿por qué Apple sigue ganando adeptos? ¿Cuál es el “truco” para que sus usuarios estén dispuestos a pagar tales sumas de dinero por sus productos?
Desde el diseño de todos sus dispositivos hasta la atención al cliente, pasando por el funcionamiento o el embalaje, podemos comprobar cierto aire de exclusividad, algo que permite diferenciar a la marca del resto de sus competidores. El secreto de Apple para distinguirse de sus competidores no es otro que optimizar la experiencia del usuario.
En una de las entradas anteriores del blog comentábamos la importancia de una buena experiencia del usuario en las páginas webs para que las visitas se transformasen en ventas. Hablábamos de la relevancia de las primeras impresiones, de eliminar las distracciones, de crear buenas microinteracciones con los usuarios… ¿Cómo incorpora Apple todos estos elementos a su modelo de negocio?
Como decimos, Apple se ha preocupado por diferenciarse del resto de empresas del sector y también por mejorar todo lo posible la experiencia de sus usuarios. Sus dispositivos son fácilmente reconocibles por sus diseños simples pero elegantes y, en gran medida, por la presencia de su logo, creando una primera impresión positiva. El diseño de sus smartphones es simple, tan sólo tiene un botón en la parte inferior de la pantalla, lo que reduce al máximo las distracciones y permite al usuario centrarse exclusivamente en la pantalla del dispositivo. El funcionamiento de sus productos está optimizado al máximo, puesto que la propia empresa se encarga del desarrollo de la mayor parte de los componentes de sus dispositivos, por ello cuida en especial las microinteracciones de sus dispositivos, algo que todos los fans de la marca adoran.
Podemos ver, por tanto, que el mundo digital no es tan distinto del modo en que las empresas funcionan en la “vida real”. Garantizar una buena experiencia a los usuarios es un sinónimo de éxito hoy en día siempre y cuando se ofrezca un producto de calidad, Apple lo sabe y ahí radica la clave de su éxito.