Está demostrado que lo audiovisual impacta con mayor facilidad al público. No en vano, en el último año el gasto en video/display fue una de las partidas que más subió en el presupuesto para el marketing digital.Sin embargo, las marcas han empezado a dar un paso más allá y no conformarse con generar contenido para un canal de Youtube. Todo eso se les ha quedado pequeño y quieren pasarse a la pantalla grande con su propia película.
El caso más sonado es quizá The Lego Movie, un largometraje producido por la famosa marca de juguetes de construcción que lleva recaudado 257.756.197 de dólares solo en los Estados Unidos y ha estado nominada a numerosas premios (entre ellos el Oscar a mejor canción). Sin ninguna duda un éxito comercial pero no solo del producto, si no que probablemente la marca Lego ha afianzado y mejorado su reputación para varias años sin necesidad de ninguna otra acción.
No es fácil producir material narrativo sobre una marca, pero parece ser que las de juguetes lo tienen más fácil y 20th Century Fox ya está negociando para hacer otra película sobre Play Doh. (sí, la plastilina). Además de el que parece ser el último recurso de Rovio por relanzar su producto estrella, «The Angry Birds Movie».
Los valores intangibles con los que funciona el Branding del siglo XXI pueden resultar en las manos adecuadas una historia narrativa que el público compra, llegando a él en el mejor de los momentos, cuando está plenamente relajado en su tiempo libre.
¿Puede ser este el principio de otra herramienta de Marketing más? Cara, eso sí, pero efectiva para los que se lo puedan permitir.